sábado, 10 de noviembre de 2012

MI VIDA EN LA INSESAM

                                                              MI VIDA EN LA INSESAM


Todos en la vida estamos llenos de sueños y meta a las edad de mis diez años mi meta era ingresar a sexto de bachillerato a la mejor institución la INSESAM mi segundo hogar y donde aprendi todo lo que hoy soy, todo lo que he logrado en mi adolescencia se lo debo a esos profesores que día a día ponían mas ganas y empeño al enseñarnos que la vida estaba llena de rosas y de obstaculos los cuales vivimos desde que entramos a sexto hasta el día de hoy.
Cuando entre en sexto el primer día fue un poco raro ya que habían personas mayores que nosotros y nos llamaban "coladitas" por lo pequeños, no olvido que en el salón todos los días había una pelea sobre todo entre Richard y Mafe eran enemigos a morir parecía que se hubiesen declarado la guerra desde el primer instante en el que entraron al colegio. Pero atraves de los años fueron mejorando y se perdió ese enemistad.
Como salón y jóvenes que somos tuvismo muchas dificultados muchos ingresamos con la ídea de llegar a graduarnos pero al final solo pocos ganamos esa batalla que se verá reflejada en pocos días cuando seamos unos bachilleres, cuando tengamos puesta esa toga y ese birrete que desde pequeños soñamos con portar y ese diploma que esperamos  nos entregue ese profesor que desde sexto hasta once nos guió por el camino de la vida, nos mostró cual era el camino correcto para llegar a cumplir nuestras metas y jamás defraudar a nuestros papás que son los que mas esperan de nosotros ya que esperan ver florecer esa semilla que sembraron hace muchisimos anos cuando nos dejaron en la puesta del colegio y muchos lloramos, tal vez muchos al día siguiente no querían volver pero tal vez, muchos querían que jamás sonara la campana y a medida que ivan avanzando los años la campana sonaba cada vez mas rápido. Hoy en día la campana sonó mas fuerte y hoy todos decimos NO, hoy quisieramos devolver el tiempo reírnos otravés, llorar una vez más pero NO. Hoy es momento de llorar porque estamos a menos de un paso de pasar a ser unos bachilleres y empezar a cumplir esas metas que nos fijamos desde niños y esos sueños que le hemos prometido a nuestros padres.
Le doy gracias a Dios y a la INSESAM por ser mi segundo hogar, donde me crie como una mejor persona, donde aprendi todo lo que sé, y donde conocí personas con las que muchas veces reí, lloré y discutí, a ninguno olvidaré porque todos fueron exelentes personas a pesar de los muchos roses hoy todos estamos unidos y hoy vale la pena decir: "Yo soy hija de la INSESAM".

Aquí mostraré mis mejores recuerdos en la INSESAM: